Beatos

 

Don José Sánchez López es canónigo de la catedral de Albacete y párroco de Minaya, aunque para todos es familiarmente «el Padre Josico». Ha compuesto más de 40 discos, con más de 800 canciones religiosas, villancicos, canciones para niños y folclóricas. También ha escrito numerosos libros, el último: «Beato Mamerto Carchano, sacerdote y mártir de Cristo». Como el protagonista del libro don José también estudió en el Seminario de Toledo y se ordenó en 1964. Muchas felicidades por su nueva obra.

El beato Mamerto Carchano nació en Elche de la Sierra (Albacete) el 21 de julio de 1879, hijo de Constantino y de Natividad. Comenzó sus estudios eclesiásticos en el seminario de Toledo; haciendo primero y segundo curso de latín en el Seminario de Murcia. Regresando a Toledo en 1899 para hacer los estudios de Teología. Ordenado Sacerdote el 19 de diciembre de 1903, canta solemnemente su primera misa en la iglesia parroquial de Elche de la Sierra, el 27 de diciembre. En esos días recibió el nombramiento de coadjutor de Ayna y después el de Alcaraz en 1905. Pasó en 1908 de ecónomo a Paterna de Madera y, poco después, mediante concurso, consiguió el nombramiento de párroco de la misma. En 1918 fue nombrado párroco de Castilléjar y en 1929 párroco de Molinicos y arcipreste de Elche de la Sierra.

Tras estallar la guerra, el 28 de julio de 1936 tuvo lugar la incautación del templo parroquial de Molinicos. Don Mamerto obtuvo permiso para trasladar el Sagrario con las Sagradas Formas a su domicilio, celebrando la misa el 29 y dando la comunión a algunos fieles. A fuerza de ruegos de sus familiares y de que el alcalde de Molinicos se declaró impotente para defenderle en caso de que extraños llegasen en su busca, el mismo día 29 resolvió marchar a su casa natal de Elche de la Sierra. Detenido el 21 de agosto, fue duramente maltratado de palabra y obra por negarse a blasfemar, recibiendo heridas de arma blanca y culatazos con los fusiles. Se le hizo barrer las calles y sacar excrementos de cuadras y retretes. Creyendo sus enemigos que moriría de un momento a otro lo condujeron a su casa. Allí comunicó a sus familiares que todo lo había sufrido por amor a Dios. La noche del 28 de agosto, don Mamerto fue sacado de su domicilio y llevado a un kilómetro del pueblo, donde fue fusilado. Tenía 57 años. Enterrado en el cementerio del pueblo, al acabar la guerra, el 12 de diciembre de 1939 fue exhumado el cadáver y trasladado a la parroquia de Elche de la Sierra. El día 28 de octubre del año 2007 fue beatificado.