JOSÉ CALDERÓN RIVADENEIRA
Párroco de Domingo Pérez (Toledo)

Había nacido en Dos Barrios el 10 de abril de 1894. Recibió la ordenación sacerdotal el 16 de marzo de 1918. Durante el primer semestre de 1936 le encontramos ejerciendo el ministerio como párroco en el pueblo de Domingo Pérez (Toledo). Se cree, casi con toda seguridad, que Don José celebró misa el 18 de julio en Domingo Pérez, y que ese mismo día se traslada a su pueblo, pero antes pasa por Madrid para visitar a una tía suya. Ésta le llama la atención por ir vestido de sacerdote ante la situación que se avecina, le convence para que vista de seglar y así llegará a su pueblo natal. Encerrándose en casa de sus padres ya no saldrá hasta que le detengan.

Una sobrina suya recuerda que el 6 de agosto mientras estaba desayunando los milicianos llaman a la puerta preguntando por Don José y su padre. Inmediatamente fueron detenidos. Llevada por la curiosidad infantil se asoma a la calle para ver como se los llevaban, vio claramente como rodeados por otro grupo de milicianos se encontraba su propio padre y alguna persona más. Todos fueron conducidos a un calabozo habilitado en la Plaza del Ayuntamiento.

Al día siguiente se les obliga a hacer una lista con aquellos que en el pueblo tenían armas. Como al iniciarse el conflicto fue obligatorio entregar las diferentes armas que se poseyesen en el Cuartel de la Guardia Civil, se les ocurre entregar una lista con aquellos que ya las habían entregado. Bien por sentirse burlados bien porque lo tenían decidido comienzan a pegarles salvajes palizas. A los pocos días soltaron algunos presos entre los que estaban Don José y su padre. Dos de sus hermanos y su propio padre serían asesinados a lo largo del mes de agosto.

Entre finales de agosto y los primeros días de septiembre fue arrestado Don José. Mientras les proponían a una cuñada y a una sobrina que les darían un salvoconducto para poder huir junto al sacerdote si traían un mono y una cantidad económica, el 6 de septiembre apareció un camión de milicianos del Puente de Vallecas (Madrid).

Sacaron a los nueve presos que en ese momento ocupaban la prisión de Dos Barrios (Toledo) y los asesinaron en el kilómetro 54 de la carretera de Andalucía, a 200 metros de donde fue asesinado el padre de Don José, como se lo hicieron saber. Se cuenta que el párroco de Domingo Pérez solicitó morir el último para poder atender a bien morir a los demás.

Conservamos una carta que Don José escribe el mismo 6 de septiembre, día de su asesinato, y que dirige a Zarauz a la Señorita Carme Silvia exponiendo la necesidad en que se encuentran la viuda y los hijos de su hermano Javier a cuyo servicio se encontraba trabajando. Dice al final:

"No sé cuál será mi suerte en la voluntad del Señor con ella me conformo de antemano: en la actualidad me encuentro encarcelado por el solo delito de ser sacerdote".