En el contexto de la gran persecución religiosa en España (1931-1939), brilla con fuerza la figura del beato José Polo Benito, sacerdote salmantino de origen humilde, pero de extraordinaria cultura, palabra encendida y espíritu combativo. Fue un destacado publicista católico, el más influyente de su tiempo, que llevó su voz a libros, conferencias y prensa, siempre en defensa de la fe y del pensamiento católico-social.
Destacó por su campaña sobre Las Hurdes y por su compromiso con temas agrarios, que abordó con visión cristiana y corazón generoso, ganándose prestigio nacional. Aunque estuvo considerado para el episcopado, su temperamento libre y su fervor apostólico no se ajustaban a cargos formales. Amó con pasión a Cristo y a su patria española, por quienes dio su vida en Toledo, víctima del odio anticristiano.
Fue mártir por Dios y por España, encarnando el ideal del sacerdote que entrega su vida por la salvación de las almas. Tras años de estudio, se le reconoce como una de las grandes figuras sacerdotales del siglo XX.
Beato José Polo Benito, ruega por España y por nosotros.
